Tratamiento de los trastornos por déficit de atención e hiperactividad
Los tratamientos para el trastorno por déficit de atención con hiperactividad están diseñados para controlar los síntomas de la discapacidad, de modo que la persona afectada pueda funcionar correctamente en el hogar, en la escuela o en entornos sociales.
Algunos psicólogos, psiquiatras o pediatras solo recetan estimulantes para tratar el TDAH. En general, esta práctica no se considera sólida. Un buen plan de tratamiento para el TDAH sería adoptar un enfoque multifacético: medicamentos y terapia conductual. El uso de estimulantes y terapias conductuales se ha demostrado a lo largo de los años.
Para los niños con TDAH que todavía están en la escuela primaria, los expertos tienen dos opciones. Debería usar medicamentos primero y controlar los resultados. Si no cumple con sus expectativas, usarían la segunda opción: medicamentos más terapia conductual.
Sin embargo, los estudios han demostrado que el enfoque multidisciplinario es más efectivo para niños mayores y adolescentes. Este enfoque generalmente incluye los siguientes elementos:
- Educación de padres e hijos sobre los tipos de TDAH, el diagnóstico del TDAH y su tratamiento.
- medicamentos para el TDAH
- Terapia conductual para niños con TDAH
- Involucrar a los maestros en el trato con niños con TDAH
- participación del consejero escolar
Se usan tres tipos de medicamentos para tratar los trastornos por déficit de atención e hiperactividad, a saber, estimulantes, no estimulantes y antidepresivos.
Los estimulantes comunes son metilfenidato (los nombres de marca incluyen Ritalin, Metadat y Concerta), las anfetaminas (los nombres de marca incluyen dexedrina, dextrostato, Vyvnase y Adderall).
Los medicamentos no estimulantes comunes son Strattera e Intuniv (nombres de marca).
El antidepresivo más común es wellbutrin. Los estudios han demostrado que es eficaz en el tratamiento del TDAH. Los resultados también son positivos cuando se trata de abordar problemas como la impulsividad, la hiperactividad y la falta de atención. Sin embargo, tenga en cuenta que Wellbutrin puede no funcionar bien para las personas que tienen ansiedad, dolor de cabeza o problemas de convulsiones debido a los posibles efectos secundarios.
Los medicamentos para el TDAH tienen algunos efectos secundarios en ciertas personas. Por lo tanto, debe ser monitoreado de cerca por los expertos.
Los efectos secundarios más comunes del uso de estimulantes para tratar el TDAH son la pérdida de apetito, insomnio, dolor de cabeza, nerviosismo, dolor de estómago y retraimiento social.
Los medicamentos no estimulantes pueden causar dolor abdominal, migrañas, fatiga y bajos niveles de energía.
Los efectos secundarios más comunes del uso de antidepresivos son latidos cardíacos irregulares, boca seca y somnolencia.
La conclusión es que cuando un niño con TDAH recibe medicamentos, sus padres deben controlar de cerca el resultado y comparar las notas con el médico que los está tratando. Esto ayudará a garantizar que los tratamientos prescritos para los trastornos por déficit de atención e hiperactividad funcionen de manera óptima.